jueves, 24 de mayo de 2012

Expectativa

Sos uno más, solo un capricho para mí. Pero qué capricho, la puta madre. Sos uno grandote y molesto que se me metió entre ceja y ceja y ahora no me lo puedo sacar.
No te quiero tanto como para interesarme de verdad o querer algo pero tus jueguitos me divierten. Demostraste ser un adversario digno, pero no te creas tanto, eh. Que solo jugás porque yo te dejo. Te hacés desear, me ignorás, todo para acapar mi atenció. (No crean, queridos y ajenos lectores, que esto es porque soy una vanidosa, yo les juro que es así como se los cuento) Quiero probarte, ponerte nervioso, hacer que mires para otro lado.Vas a caer, porque soy diferente, porque te morís de ganas.
Dejá de dar vueltas ya, que me aburro y el humo no me deja ver. Sabés que siempre digo que sí.

jueves, 17 de mayo de 2012

Lejos de casa y a la deriva (Marcos)

Marcos era mi amigo, o algo así.
Jugábamos a querer morir.
Nos salía mal, muy mal.
Hasta que un día el juego no me hizo reir,
El juego se hizo realidad.
Me gustaría entender,
No enojarme,
No amargarme,
Miento si te diro que estoy bien así,
Miento si te digo que tengo control sobre mi.
Lejos de casa y a la deriva,
Sin poder correr a vos.
Miento si te digo que tu presencia no está más.
Lejos de casa y a la deriva,
Preguntando dónde estás.
Por qué sigo acá. por qué no estás más.
Por qué, Marcos, por qué.
Lejos de casa y a la deriva,
Hoy te lleve flores,
Esas que odiabas,
Para hacerte enojar.
Me quedo acá,
Allá no te voy a encontrar.
Lejos de casa y a la deriva,
Corazón ausente, mirada vacía.
Recuerdos de Marcos,
Lejos de casa y a la deriva.
 

martes, 15 de mayo de 2012

Descripción.

Tengo ojos marrones y emociones superficiales. Soy un metro setenta de introversión y observación. Hablo, tengo la voz aguda y no la soporto. Me tropiezo con mis propias piernas y tengo ambas rodillas marcadas de tantas caídas. Se cocinar y me gusta como se siente la melancolía. Me dijeron que tengo un aura de cielo nublado, con algún que otro relámpago. No se si es verdad. Cuestiono todo y sobrepienso bastante. Cuando era chiquita no me abrazaron todas las veces que lo que necesité. Me decepciono con facilidad y me cuesta decir que no. Se como se siente el infinito y me gusta la gente con las manos frías. El contacto físico me da mucha paz. Soy una más del montón. Tengo hipermetropía y astigmatismo. Me levanto de buen humor. Tengo las enfermedades de la clase media y me gusta organizar cosas. Tengo una caligrafía horrible y me encanta. Soy agnóstica pero en el fondo me encantaría creer en algo. Se escribir al revés y dibujo desde que tengo memoria. Soy feminista y tengo cicatrices por todos lados. Me creen intimidante pero soy completamente vulnerable.Soy una buena mentirosa y una mala actriz. El pasado me persigue como a todos. Duermo desnuda y me gusta contar historias.
Basado en Breve descripción de mi persona.

sábado, 12 de mayo de 2012

Gente Común

Ana tiene casi cuarenta años y sabe de desamores, desazones y tantas otras cosas que empiezan con ''des''. Está harta de todo. Pero se toma una de las pastillas que le recetaron y se olvida de enojarse. Sabe que todas sus emociones están condicionadas y controladas por químicos. Quiere gritar pero se toma otra pastillita y entra en una ensoñación. Nada duele, nada molesta, nada es real.
Juan tiene veinte años recién cumplidos y le tiene miedo a la oscuridad. Tiene amigos, sale y se divierte. Desde que aprendió a escribir, a los cinco años, escribe canciones, cuentos y poemas. A sus quince años se enamoró por primera vez de una chica, le mostró una canción que le había escrito, ella se rió y se fue. Desde ahí, escribe en secreto y no planea contárselo a nadie.  No le molesta para nada esto.
Marina despierta todas las mañanas desde hace dos años esperando que hoy le digan que todo es una mentira, que en realidad su amiga se fue de viaje por ahí como tanto le gustaba hacer. En el fondo, hace unos cuantos meses, sabe que no es así. Que no va a volver. Y a veces no duerme pensando que a lo mejor podría haber hecho algo.
Gabo se prepara para otra noche más en la que se tiene que escapar de su casa, no porque quiera, sino porque simplemente no puede soportarlo más. Su familia nunca se da cuenta de que falta. De todas formas, es feliz, cree que en algún momento va a pegarla haciendo lo que más le gusta y se va a dedicar de lleno a eso.
Martín está al borde de un abismo, literalmente. No tiene miedo. Piensa en saltar pero dos segundos antes se arrepiente. No porque sabe que va a ser extrañado o llorado, sino porque en el fondo, muy adentro, sabe que no puede darse el gusto de dejar que el mundo gane. Sabe que, aunque sea Martín y su documento diga que se llama Carolina, vale la pena irse habiendo luchado. Carolina/Martín. Saltar o no. O no.
Laura acaba de darse cuenta que está enamorada.

jueves, 3 de mayo de 2012

Tresdemayo.

Todos los tres de Mayo, religiosamente, te dedico unas palabritas. No es que hayan pasado tantos tres de Mayo. Solo cuatro, cuatro tres de mayo. Cuatro años. No se si es por costumbre o qué. Lo hago y listo. Y no es mi culpa, ¿sabés? Es que me volaste la cabeza. Es que el último encuentro no me sirvió de cierre. Fue más una apertura que un cierre. Me abriste en dos, de la nada, caminando casualmente por ahí. Ese día en que nos despedimos sin despedirnos me quedó en la sangre y todavía tiene gusto a poco. No dormí mucho hoy, tratando de recordar tu cara con nitidez. No dormí, no. Nadé en recuerdos para buscar algo que me de una pista sobre vos y tu paradero pero no encontré nada y salí a flote porque me estaba ahogando. Hoy no dormí, casi me ahogué y ahora brindo a tu salud. Brindo por otro tres de Mayo, por otro año en mi memoria, porque quizás todavía te acordás de mi. Brindo por verte una vez más y reirme de mi por ser una pendeja que no supo cuándo hablar. Reirme porque pasaron cuatro años y no me olvidé. Reirme porque creo que nunca me voy a olvidar.